La UCI emitió un comunicado oficial donde habla sobre la más reciente investigación policial de una red internacional de dopaje sanguíneo en Alemania y Austria.
El ente rector del ciclismo solicitó a la Cycling Anti-Doping Foundation (CADF) “la cooperación de las autoridades austriacas y la AMA para garantizar que toda la información que directa o indirectamente tenga que ver con el ciclismo sea entregada sin demora».
La UCI dijo que no estaba implicada en la investigación y afirmo que «inicialmente no estaba destinada al ciclismo», y agregó que no tiene información de primera mano sobre las confesiones hechas por los ciclistas a las autoridades austriacas.
Cinco esquiadores nórdicos fueron arrestados la semana pasada durante lo que la policía austriaca llamó «Operación Aderlass”, en donde uno de ellos fue atrapado mientras se sometía a una transfusión de sangre en su habitación el día antes de competir en una carrera de esquí nórdico en el Campeonato Mundial en Seefeld, Austria.
Durante el fin de semana se informó ampliamente que el ex ciclista del extinto equipo Aqua Blue Sport, Stefan Denifl, confesó haberse dopado después de ser interrogado como parte de la investigación en Austria. El lunes, se supo que el austriaco Georg Preidler confesó haber extraído su sangre para una posible transfusión.
Preidler dejó el equipo de Groupama-FDJ el domingo, y el equipo WorldTour francés reveló que el corredor había admitido que le habían extraído la sangre en dos ocasiones a finales de 2018.
La Operación Aderlass se centra alrededor del Dr. Mark Schmidt y su familia. Según informes, se descubrieron 40 bolsas de sangre en un garaje en Erfurt, Alemania. Schmidt anteriormente fue médico en los equipos ciclistas de Gerolsteiner y Milram. Bernard Kohl lo acusó de dopaje cuando el corredor austriaco fue capturado en 2008, pero fue absuelto después de un juicio.
Según los informes de los medios de comunicación alemanes, Schmidt está listo para cooperar con los investigadores y quizás revelar el nombre de muchos de sus clientes. Al igual que en la investigación de la Operación Puerto en España, gestionada por el Dr. Eufemiano Fuentes, las bolsas de sangre están etiquetadas con abreviaturas simples o nombres en clave.
Los investigadores esperan obtener una orden judicial para conseguir el ADN de los atletas acusados para que se pueda confirmar la identidad de las 40 bolsas de sangre. El actual campeón del mundo, Alejandro Valverde, fue identificado como un cliente del Dr. Fuentes de esta manera como parte de una investigación realizada por funcionarios italianos contra el dopaje. Posteriormente fue suspendido durante dos años en 2010.
El esquí nórdico y el ciclismo han sido afectados por numerosos escándalos de dopaje en los últimos 30 años, con la creación del Pasaporte biológico de valores sanguíneos longitudinales destinados a detectar técnicas de manipulación en la sangre. Sin embargo, pocos atletas han sido suspendidos a través del Pasaporte Biológico, y por ellos su verdadera efectividad a menudo es cuestionada.
Existe la sospecha de que los atletas utilizan técnicas de micro dopaje para mantenerse dentro de sus parámetros en el Pasaporte biológico, extrayendo cantidades aproximadas a 135 mililitros de glóbulos rojos empaquetados lejos antes de la competencia y luego inyectándolos antes o durante las carreras. Las agujas están prohibidas en el ciclismo, pero la regla es difícil de hacer cumplir. Se sospecha que los atletas utilizan el entrenamiento de altitud, los viajes de larga distancia y las enfermedades como una forma de justificar cualquier variación en su Pasaporte biológico.
La UCI dijo que seguirá de cerca la investigación de la Operación Aderlass y tomará todas las medidas posibles tan pronto como esté en posesión de los elementos solicitados.
Bajo las reglas de la UCI, la federación internacional es responsable de cualquier acción disciplinaria posterior contra cualquier ciclista que haya demostrado estar involucrado. Los atletas enfrentan suspensiones de cuatro años por delitos de dopaje.