El ciclista británico Chris Froome (Team Sky) esperaba que sus rivales más próximos realizarían ataques en la subida a la Pandera, y así fue.
Vincenzo Nibali (Bahrain-Merida) fue uno de los animadores de la jornada mostrándose muy activo en los últimos kilómetros de la subida final. A pesar de todo su esfuerzo lo único que pudo recortar al líder de la Vuelta fueron los cuatro segundos de bonificación que logró al entrar en la tercera posición: “La última subida era muy dura y lo hemos intentado todos, pero no ha podido ser”.
El ciclista italiano esta ahora a 52 segundos de Chris Froome y sabe que aún quedan “etapas duras”, pero el líder de la Vuelta a España no mutra flaquezas a pesar de recibir ataques de todos los flancos:
“Froome está muy fuerte y tiene un gran equipo, así que es muy complicado sacarle diferencias, por mucho que hicimos, al final siempre lograba llegar a nuestra rueda”.