Peter Sagan explicó que su intensión de disputar el GP de Montreal fue deshecha por un pelotón que se negó a cooperar con el campeón del mundo en la persecución de la fuga.
Los dos ciclistas que se batieron el viernes, Greg Van Avermaet (BMC) y Michael Matthews (Team Sunweb), vencieron al eslovaco en la línea de meta a 16 segundos del ganador Diego Ulissi. El resultado final de Sagan fue un noveno lugar en su última carrera antes de los Campeonatos Mundiales, donde apunta a un tercer título consecutivo.
Ganador en Montreal en 2012, Sagan fue segundo detrás de Van Avermaet el año pasado para después ganar un segundo título de los Mundiales en Doha. Habiendo demostrado su forma ganadora y su condición en Quebec, Sagan explicó que la segunda de las carreras de un día en Canadá era diferente a ediciones anteriores. El ciclista de 27 años agregó que aunque estaba dispuesto a disputar la victoria, no iba a arrastrar a sus rivales a la línea sin que ellos compartieran la carga de trabajo.
«Podría decir que el Gran Premio Ciclista de Montreal de este año fue una carrera extraña, y toda la plantilla del Bora-Hansgrohe puso un gran esfuerzo con Lukas Pöstlberger, que se esforzaba por controlar las escapadas cuando era necesario», dijo Sagan. «En los últimos kilómetros, un pequeño grupo logró alejarse y abrir un hueco con el pelotón. Traté de conectarles y traerlos de vuelta, pero no hubo cooperación de los otros ciclistas del pelotón.”
«No iba a hacer todo el trabajo por mi cuenta, así que la brecha se mantuvo hasta el final y Ulissi consiguió la victoria. Sin embargo, eso es el ciclismo y tengo que aceptar el resultado. Es hora de volver a Europa y centrarse en el último objetivo principal de la temporada, el Campeonato del Mundo en Noruega».
El resultado de Sagan terminó una racha de victorias o podio en cada carrera que comenzó desde el Tour de California en mayo. A pesar de perder el podio, Patxi Vila explicó que cree que Sagan volvió a demostrar que era el ciclista a batir y que a pesar del fuerte equipo del Bora, no podían superar a los equipos rivales.
«Fue una carrera dura en realidad, es mucho más difícil de lo que parece en la televisión. Con una escalada total de casi 4.000 metros, es comparable a una etapa de montaña de una Gran Vuelta! El equipo hizo su trabajo incansablemente, al igual que lo hicieron el viernes en Quebec», dijo Vila. «Bora-Hansgrohe no es simplemente fuerte por Peter Sagan, es un fuerte conjunto de ciclistas para apoyar a un fuerte Peter Sagan, pero los otros equipos tenían sus propias prioridades y estrategias y no había mucho más que pudiéramos hacer.”