Vincenzo Nibali (Bahréin-Mérida) cree que los sectores empedrados en la etapa 9 del Tour de Francia 2018 serán aún más traicioneros que los recorridos en las últimas ediciones de la carrera. El siciliano hizo reconocimiento del pavé el lunes y dijo después que planea regresar para un segundo reconocimiento antes de julio.
«Comparado con 2014 y 2015, encontré que algunos sectores son más peligrosos. Y lo serán aún más si llueve», dijo Nibali a La Gazzetta dello Sport.
«En algunos sectores había mucha agua a los lados y mucho barro. Comparado con las anteriores ediciones, tendremos más kilómetros en el pavé, por lo que será sin duda una etapa muy importante. Tan pronto como mi agenda lo permita, quiero venir para otro reconocimiento”.
Nibali sentó las bases de su victoria en el Tour de Francia de 2014 en la etapa de pavé donde defendió su maillot jaune al colocarse tercero por detrás del ganador Lars Boom, además metió casi dos minutos a sus perseguidores en la clasificación general.
Un año después, el Tour regresó a los adoquines es camino a Cambrai, aunque las condiciones secas ayudaron para que los principales contendientes a la general llegaran al final juntos en una etapa ganada por Tony Martin.
La etapa 9 del Tour de este año será la más difícil que las recientes incursiones de la carrera en los adoquines con 15 sectores de pavé sobre un recorrido de 154 kilómetros desde Arras a Roubaix. Los 21.7km de adoquines en la ruta cuentan con sectores de Paris-Roubaix, incluidos los famosos tramos de Mons-en-Pévèle y Ennevelin.
El lunes, Nibali reconoció los tres primeros sectores en auto, antes de pasar el resto de la etapa en compañía de su compañero de equipo Franco Pellizotti, y seguido por los directores deportivos Rik Verbrugghe y Tristan Hoffman. «Es peor que una etapa de montaña», dijo Pellizotti a La Gazzetta.
Nibali ya había utilizado su debut en el Tour de Flandes a principios de este mes para realizar parte de sus pruebas a los materiales para los adoquines del Tour de Francia. El ganador de Milán-San Remo comenzó la Vuelta al País Vasco al día siguiente, aunque abandonó después de cuatro etapas. Nibali llegó en la casilla 32 en Amstel Gold Race el domingo, y se alineará en la Flecha Valona el miércoles como preparación para su objetivo principal de la primavera, la Lieja-Bastogne-Lieja.
Enrico Gasparotto, tercero en Amstel el domingo y quinto en el Mur de Huy en 2016, liderará al equipo del Bahréin-Mérida en la Flecha Valona junto con Ion Izagirre.