El ciclista colombiano Nairo Quintana (Movistar Team) desafortunadamente siguió cediendo tiempo ante sus rivales directos una vez finalizado la contrarreloj por equipos de la tercera etapa del Tour de Francia.
A pesar del resultado, Movistar Team realizo una buena prueba perdiendo menos tiempo del que se tenía previsto, hecho que mantiene con esperanzas al equipo español.
Nairo por su parte cataloga como de «un buen resultado» la contrarreloj hecha en Cholet, donde Movistar perdió 53 segundos con el equipo ganador, el BMC Racing y 49 respecto al Team Sky de Chris Froome, aunque precisó que «nunca es agradable perder tiempo».
“Pienso que la hemos hecho bien, que en un recorrido tan rápido, donde el peso y la potencia van de la mano nos hemos sabido defender, y que es un buen resultado. Siempre que se pierde tiempo no es agradable, pero no fue demasiado», dijo en meta.
La contrarreloj por equipos de 35.5 kilómetros presentaba un perfil ondulado y que se adaptaba a los especialistas con más peso y potencia. Los escaladores se verían en desventaja y las pérdidas de ciclistas como Quintana y Bardet que tienen bajo peso eran de esperarse.
“Ya antes de comenzar la carrera comentábamos que esta era una ‘anti-crono’ para nosotros, un recorrido de mucha potencia, muy rápido, donde nosotros, que somos más escaladores, que teníamos que pelear contra equipos como el Sky o el BMC, que son más especialistas.”
Cuando Movistar Team cruzo el primer punto intermedio de la contrarreloj registraba solo una diferencia de un segundo respecto a equipos como Mitchelton-Scott y Team Sky. Pero en el segundo sector las cosas se vieron mal para la escuadra telefónica
“La segunda mitad de la crono, con más viento y de rodar más rápido, pienso que se salvó dignamente. Tendremos que seguir agresivos y librando dificultades. Queda el pavé y etapas llanas como la de mañana, con rotondas, pueblos, isletas… siempre con peligro”.
La cuarta etapa del Tour de Francia se disputara mañana 10 de julio con un recorrido de 195 kilómetros entre las localidades de La Baule y Sarzeau, una jornada con un perfil que se adapta perfectamente a los ciclistas más rápidos del pelotón.